Temperamento de los caballos
Los caballos son mamíferos, por lo que siempre tienen la sangre caliente biológicamente hablando. No obstante seguro que has oído hablar de “caballos de sangre caliente” o “raza de sangre templada”. Este tipo de términos sirve para determinar el temperamento del animal, no la temperatura su cuerpo.
Razas de caballos de sangre caliente
Las llamadas razas de “sangre caliente" son principalmente de origen oriental e incluyen los caballos Akhal-Teke, los barbos, los árabes , los turcomanos (ahora extintos) y los pura sangre desarrollados a partir de éstos.
Estos son animales criados por su agilidad y su velocidad, siendo animales muy vivos y con gran facilidad para aprender. Físicamente refinados, su piel es delgada, su silueta esbelta y sus piernas largas.
Estas razas fueron importadas a Europa desde Oriente Medio y el Norte de África, cuando los criadores quisieron introducir cualidades de velocidad y rapidez a las monturas de caballería ligera.
Razas de caballos de sangre fría
La mayoría de los caballos de tiro, poderosos y musculosos, son de razas consideradas de " sangre fría". Éstos han sido criados desde sus orígenes principalmente por su fuerza, su resistencia, su calma y su paciencia, cualidades necesarias para tirar de un arado o de un carro pesado lleno de pasajeros.
Este tipo de caballos muchas veces son conocidos con cariño como “gigantes amables”. Las razas más conocidas incluyen los caballos de tiro belgas o los Clydesdale. Algunos como el Percherón son más ligeros y con un poco más de vitalidad. Otros como el lento y poderoso Shire se crearon para arar campos con suelos pesados arcillosos. Los caballos de sangre fría también incluyen algunas razas de ponis como los Fjord.
Razas de caballos mestizos o de sangre templada
Los caballos de sangre templada como los de silla franceses, los Hunter irlandeses, los Trakehner o los hannoverianos son generalmente caballos creados por el ejército a través de cruces entre caballos locales de sangre fría con caballos de sangre calientes exportados para los cruces, como los árabes o los pura sangre.
El objetivo de esos cruces es conseguir un caballo con las virtudes de ambos tipos de caballos, obteniendo individuos más refinados que los caballos de tiro, pero también más grandes y más calmados que los caballos de sangre caliente.
Los caballos mestizos o de sangre templada son los grandes dominadores de los deportes ecuestres olímpicos como la doma y el salto de obstáculos desde los años 70.
